El día que hicimos El Hombre de las Tabernas, encontramos una línea muy atractiva en la parte superior de las paredes de Ranero. Según finaliza la vía y después de salir al jardín superior, en la parte de la derecha aparecen unas plaquitas de unos 15-20m a lo sumo; en este pequeño paño de roca divisamos una estética fisura y ya que teníamos todo el material de autoprotección en el arnés decidimos darle un intento.

En principio creemos que no cuenta con ninguna ascensión, ya que se encontraba bastante sucia de hierbas y plantas. Nosotros la hemos abierto desde abajo, se ha liberado y proponemos un grado de 6c. A excepción de la reunión que cuenta con dos parabolts con maillón como descuelgue, el resto de la línea está completamente limpia y con un juego de friends (hasta el 3) y algún fisurero mediano se puede hacer sin problemas. La hemos limpiado de vegetación y bautizado como “Nunca he dejado el rock’n’roll”.

Es una buena forma de finalizar un día de escalada en Ranero después de hacer El Hombre de las Tabernas o cualquier otra ruta de la zona, ideal para aquellas cordadas que se queden con ganas de hacer unos pocos metros más y cacharrear en una caliza muy agradecida y de muy buena calidad.

Como ya digo, debido a su estado, creemos que nadie la había hecho antes, sin embargo si resulta que alguien ya ha ascendido por ahí antes que nosotros, que deje un comentario aquí en el blog y corregimos la entrada, sin ningún tipo de problema.


Aquí dejo un vídeo y un croquis de la vía. Espero que la disfrutéis.


Croquis de la vía

Localización