A pesar de que ha llovido por la noche, esta mañana hemos decidido acercarnos de nuevo a nuestro emblemático Atxarte. La verdad que hacía ya tiempo que no nos subíamos a sus paredes y parece que ya nos pica el gusanillo. La idea era ir a pasar la mañana del lunes de reyes, para estar pronto y poder comer en casa.

Llegamos pronto al parking de los espolones y preparamos todo el material aun con el frontal en nuestras cabezas. Comenzamos la aproximación y ya vamos viendo la tónica de lo que nos espera: viento, muuuuucho viento...

Empezamos a escalar el primer largo por el Diedro Olvidado (6a), vía que va paralela y por la derecha del repetidísimo Largo Común del primer espolón.

Como no nos vamos a poder comunicar debido al gran viento que hay (sí, va a ser el gran protagonista de hoy), acordamos lo siguiente: un silbido es que he llegado a la reunión, después recojo cuerda y otro silbido significa que ya está montada la reu y puedes empezar a escalar. Perfecto, comienza la escalada.

En primer lugar sube Urko siguiendo la línea de químicos perfectamente visible desde el suelo, sin embargo, en vez de detenerse en la primera cadena sigue unos metros más arriba para montar la mítica R de la Arteka, la Nueva y la Hipernova. Silbido. Bien, ha llegado a la reunión. Suelto el reverso y me calzo los gatos. Recoge cuerda y... ¿silbido? pfff ni idea, no se oye nada, ¿podré empezar ya a escalar? sin pensármelo mucho más tiro para arriba. ¡¡URKOOOO RECOGEEE!! No hay respuesta. ¡¡URKOOO!! Nada... Estoy unos minutos más esperando antes del paso y por fin parece que puedo continuar. Llego a la reunión bajo una lluvia de piedras.

 Urko y yo en la reunión 

Para llegar a la cima del primer espolón, esta vez hemos decidido escalar un 6b+ del que no teníamos mucha información: Hipernova. La vía sale hacia la derecha y discurre en todo momento entre la Arteka y la Nueva. El primer parabolt se aprecia perfectamente desde el inicio. Se trata de una especie de diedro con pasos de placa de vez en cuando. Los pies sobre adherencias bastante finas y con bastante alegría entre seguros (además las fortísimas rachas de viento le dan un ambiente especial).

 Después de la sección que le da el grado a la vía, hay que hacer una especie de bavaresa por un filo (con pies de nuevo en adherencia) en la que el viento casi me manda un par de veces de vuelta al parking. Reunión común con la Arteka.

Silbido. ¿Me habrá oído? Le llamo al móvil por si acaso, pero no contesta. Recojo la cuerda y monto la reunión. Vuelvo a silbar. Parece que esta vez sí que me ha escuchado y Urko comienza a escalar. La verdad que he tardado bastante en hacer el largo y ahora que estoy colgado de la reunión empiezo a estar un poco harto del maldito viento. Ya ni ambiente ni hostias, es que no da tregua...

Urko escalando y yo cagándome en todo debido al incansable viento

Urko en lo alto del primer espolón

¿Subimos al tercer espolón a hacer la Normal? miradas cómplices entre Urko y yo... Vengaaa tira para abajo y vamos a tomarnos una cerveza bien resguardados de este maldito vendaval, jajaja.


Yo intentando recoger cuerda

En conclusión: buena mañana retomando la escalada en el precioso valle de Atxarte que ya teníamos algo olvidado. Las dos vías que hemos hecho hoy son muy buenas, pero sin embargo la Hipernova sí que es digna de una mención especial, largo 5 estrellas sin duda, de roca excepcional, nada que envidiar a la Arteka.

Merecida cerveza


Volveremos pronto a Atxarte, con menos viento, a poder ser ;)

 Croquis del Diedro Olvidado e Hipernova