Asier y yo nos hemos acercado nuevamente a Ogoño para escalar una vía mítica que ninguno de los dos teníamos probada: La Recia.

La vía comienza unos metros a la derecha de La Baldragas, justo antes de bajar el árbol del bombero. Se encuentra completamente equipada con químicos por lo que es bastante reconocible desde el suelo. Además, los primeros metros discurren por un diedro muy evidente.

El primer largo (7b) rondará los 40m. Se va dejando escalar bastante bien hasta que llegamos a la sección más apretona. La verdad que tanto a Zuga como a mi nos puso las porras bien calentitas.

Asier y yo en la R

El segundo largo (7a) es sin duda el mejor de la vía. Se trata de una espectacular placa que por poco no llegará a los 50m. Empieza con tendencia en travesía a la izquierda para después enderezarse y ya continuar recto hasta la R. Surca un maravilloso muro de agujeros, regletas y pies pequeños. Una gozada.

Asier terminando el segundo largo

El tercer largo (6c+) bien podría recordarnos a cualquier típica panza riglera. Un extraplomo nada más salir de la reunión le otorga el grado al largo y después ya por terreno más sencillo hasta la cima de la pared.

Croquis de La Recia